aliméntate

Evita pronunciar las frases que utiliza todo el mundo. Inventa tu propia forma de hablar, aunque sólo sea para expresar eso que crees que está diciendo todo el mundo. Haz un esfuerzo por distanciarte de Internet. Lee libros.

Debes estar alerta ante el empleo de las palabras extremismo y terrorismo. Sé consciente de los fatídicos conceptos de emergencia y excepción. Enfádate ante el uso traicionero del vocabulario patriótico.

La vuelta hoy a la escuela, marca el regreso al tiempo de trabajo hasta el verano, en Iruñea hasta los Sanfermines. No desesperemos. Es un buen momento también para alimentar nuestra mente con lecturas que nos hagan pensar, reflexionar o que sin más nos ofrezcan elementos para poder contrastar en el día a día. Un día a día marcado por una política en donde lo que está en juego es el propio concepto de democracia. Si nuestra vida colectiva fuese trasladada a una serie para la televisión, estaríamos ante una serie cuya intensidad en los capítulos desbancaría en el ranking a Juego de Tronos. Y en esta serie, si queremos sobrevivir, tenemos que dejar de ser la masa aborregada que el poder quiere que seamos y para eso es necesario que leamos, aprendamos a desarrollar el pensamiento y creemos nuestra propia conciencia en el mundo, con el papel que queremos jugar en él. Y todo esto sin ayuda de la televisión.

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Los dos párrafos que sirven de introducción a este artículo son el comienzo de sendos capítulos en el libro que quiero reseñar y recomendar hoy. Se trata de un ensayo, pedagógico y accesible, del profesor e historiador (y catedrático, y doctor, e investigador), Timothy Snyder, titulado Sobre la tiranía. Veinte lecciones que aprender del siglo XX, editado por Galaxia Gutenberg. Antes de comenzar quiero advertir de algo que, si bien es importante conocerlo, no es impedimento, ni mucho menos, para leer el libro y desde luego aprovecharlo. El autor, estadounidense, escribió la obra a principios de 2017, esto es, con Donald Trump ya en la presidencia de EEUU y tras la farragosa (¿acaso hay alguna que no lo sea?) campaña electoral. En varios pasajes se refiere, por lo tanto, a situaciones concretas de su país, a la entonces reciente campaña electoral y a frases textuales del presidente Trump. Esto, más allá de poder considerarlo un contratiempo, resulta ser un aliciente ya que el localismo está lo suficientemente globalizado como para que al otro lado del charco podamos sacar provecho de él.

El objetivo del ensayo es simple y claro: poder utilizar la historia del pasado siglo XX para aprender de ella y no repetir lo sucedido en esa centuria. Concretamente se refiere al nacimiento del nazismo, a la 2ª Guerra Mundial y al régimen totalitario impuesto por la URSS en algunos países tras la guerra. Todo esto aderezado con la historia más reciente de EEUU. Se echan en falta referencias a otros totalitarismos, como el impuesto por el neoliberalismo, la globalización mediática o el propio neocolonialismo de guerra que EEUU ha practicado y practica desde el fin de la II Guerra Mundial. De la misma manera sorprende que en las referencias al fascismo no nombre siquiera el franquismo (es verdad que tampoco señala las dictaduras militares de Chile y Argentina, por poner un ejemplo). Con esta premisa el ensayo enumera veinte lecciones que aprovechar de la historia (occidental) del siglo XX. Aquí unos ejemplos:

  • No obedezcas por anticipado. La mayor parte del poder del autoritarismo le ha sido otorgado libremente.
  • Defiende las instituciones. No hables de «nuestras instituciones» a menos que las hagas tuyas por el procedimiento de actuar en su nombre. Las instituciones no se protegen a sí mismas.
  • Cuidado con el Estado de partido único. Apoya el sistema multipartidista y defiende las normas de las elecciones democráticas.
  • Asume tu responsabilidad por el aspecto del mundo. Los símbolos de hoy hacen posible la realidad de mañana. Fíjate en las esvásticas y demás signos de odio. No apartes la mirada ni te acostumbres a ellos.
  • Desmárcate del resto. Acuérdate de Rosa Parks. En cuanto alguien da ejemplo, se rompe el hechizo del statu quo, y otros le seguirán.
  • Cree en la verdad. Renunciar a los hechos es renunciar a la libertad. Si nada es verdad, nadie puede criticar al poder, porque no hay ninguna base sobre la que hacerlo.
  • Contribuye a las buenas causas. Participa activamente en las organizaciones, políticas o no, que expresen tu forma de entender la vida.
  • Mantén la calma cuando ocurra lo impensable. La tiranía moderna es la gestión del terror. Cuando se produce un ataque terrorista, recuerda que los autoritarios se aprovechan de esos sucesos para consolidar su poder. No te dejes engañar.

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Un libro para quienes quieran tener elementos que les permitan reflexionar en la vida diaria, para quienes quieran poner en práctica la teoría de la resistencia y poder empezar a construir una sociedad más justa, igualitaria y democrática. Para quienes creen que la historia no nos puede enseñar nada y para quienes piensan que lo que ocurrió hace décadas ya no puede volver a repetirse, por lo menos no aquí. Para darse cuenta de su gran error. Para quienes han sufrido y sufren la tiranía en Cataluña, en Euskal Herria y en cualquier otra parte del Estado por haberse puesto frente a quien quiere imponer un relato, un pensamiento único y una masa social. Para todas y todos los que siguen creyendo que la Utopía es posible.

 

no leas, no pienses

Fue gracias al último vídeo de Deborahlibros, por la que me enteré que el gobierno del PP ha decidido eliminar la asignatura de Literatura universal del plan de estudios obligatorio de Bachillerato. Y la verdad es que no me lo podía creer. ¿Cómo van a quitar Literatura del plan de estudios de Bachillerato? ¿Ya no se va a enseñar la cultura escrita a través de los siglos y que ha sido testigo, altavoz y cronista de la Historia? Pues no. Rajoy y su gobierno han decidido que eso es prescindible. Ya lo dijo el ex ministro Wert hace unos meses: «los alumnos tienen que aprender asignaturas que les capaciten para el mercado laboral».

En su momento quitaron la Música como asignatura, sin darse cuenta que la música mejora el vocabulario, ayuda a concentrarse, potencia el desarrollo cognitivo y libera los sentimientos. Hay una íntima relación entre la especie humana y la música que nos hace personas. Quitaron también la filosofía, esto es, el estudio y la capacitación para abordar reflexiones sobre problemas fundamentales en cuestiones como la existencia, la belleza, el conocimiento, la verdad o el ser. Y ahora quitan la literatura. ¿Qué es lo que persiguen desde el gobierno del PP?

El gobierno del PP es un títere del capital cuyo único objetivo en cuanto a la educación es crear peones que sirvan al desarrollo del mismo capital. Para eso hay que capacitarlos en el desarrollo de aspectos técnicos y manuales, pero no mentales. España es cada vez más un país de chichinabo que expide títulos, en vez de saber, que valora exclusivamente cumplir un currículum, en vez de en desarrollar la curiosidad y el afán de conocimiento y que, sobre todo, dificulta y en gran medida impide el desarrollo y la autonomía para pensar. Mientras tanto se hunde en el fango de la corrupción instalada en todos y cada uno de los estamentos que hacen el país.

El aprendizaje de la literatura es básico para desarrollar la lectura crítica que es, a su vez, uno de los elementos principales para el progreso del pensamiento. Sin saber y conocer la literatura universal, las personas tendrán menos capacidades para leer de manera crítica y contrastada, con lo que el pensamiento individual y colectivo será cada vez más limitado y sujeto a un pensamiento mayoritario, si no único. De ahí a seguir votando a un partido asentado en la corrupción, como es el PP, no hay más que un pequeño paso. Ellos no quieren que leamos. No quieren que pensemos. Quieren pensar por nosotras y nosotros. Nos quieren pensar. Así de simple.

El cementerio de libros perdidos

Pero en esto, como en otras cuestiones, podemos ser rebeldes simplemente leyendo literatura. Y la literatura amigas, amigos, es como todo. Necesita su práctica y su camino. Si no estás acostumbrado a leer no empieces con el Ulises de Joyce. Pero empieza con algo, que hay mucho y bueno donde empezar. Y para ello vete a las librerías de Iruñea, esas que tienen libreros y libreras. Ni se te ocurra irte a un centro comercial. Y coges al librero, que se llaman así porque saben de libros, y le pides un libro para empezar a leer y fliparás en colores con las chuladas que te van a aconsejar. Y el gusanillo irá entrando, poco a poco, piskanaka-piskanaka que decimos por aquí, y de repente te encontrarás leyendo cada vez más, viendo menos basura en la caja tonta y pensando de manera autónoma. Hoy domingo es el Día del Libro. En Iruñea lo celebraremos, así lo han querido las y los libreros, el lunes en los puestos de Carlos III. Date el gusto, pregúntales, déjate aconsejar y cómprate un libro. Si no tienes pasta, vete a la biblioteca y pilla uno. Y después, por la tarde, siéntate en el sofá y comienza la aventura de leer, la aventura de pensar.


Los sinvergüenzas del Ministerio español de Educación, Cultura y Deporte también celebran, en una suerte de broma macabra, el Día del Libro. Este año, para más cachondeo, lo han titulado Leer ¿o qué? La solución es fácil. Leer o pensamiento único. Leer o PP.